He de reconocer, que a pesar de vivir relativamente cerca de Ferrol y haber estado bastantes veces por Ferrolterra, no conocía la existencia de la fiesta de la Noche de las Pepitas (Noite das Pepitas). Así que nos fuimos hasta Ferrol a descubrirla.
Si iba a ir a conocer esta fiesta, tenía que informarme un poco….
Investigando
Empecé googleando un poco sobre la fiesta, una búsqueda que me llevó directamente a un nuevo término en mi vocabulario: Rondalla. Vale, perfecto… pero he de reconocer que no sabía mucho sobre las Rondallas. El nombre se me hacía familiar, pero poco más… La primera foto que encontré sobre las rondallas me mostró algo similar a una tuna. Ok, entonces, ¿ésto va de tunas? ¿o no?
¿Qué es una Rondalla?
La Rondalla es una costumbre popular que deriva de “El canto de ronda” o “ronda”. Se trata de un grupo de músicos, sobre todo hombres (algo que está cambiando afortunadamente) que cantan y tocan todo tipo de instrumentos, sobre todo instrumentos de cuerda como mandolinas, guitarras, bandurrias, violines, laúdes, flautas, violoncelos… y por supuesto, panderetas.
A pesar de pasar una época en la que casi desaparecieron, las Rondallas han sobrevivido y empiezan a resurgir de nuevo. Decir que las murgas, las comparsas o incluso las tunas, son tipos de grupos que han derivado de las rondallas clásicas, guardando aún muchas similitudes.
El objetivo de estas rondallas eran varios, como amenizar las fiestas patronales y romerías populares o el cortejo de alguna mujer, es decir, rondarlas. Hoy su función es más festiva y de ocio, formadas por grupos de amigos que buscan pasárselo bien y disfrutar de su amor por la música.
Rondallas en Ferrol. Un poco de historia.
En Ferrol, según he podido leer, las primeras rondallas aparecen gracias a los trabajadores de los astilleros, que cantaban en bares, tabernas y fiestas de la ciudad.
Es precisamente por los astilleros que la famosa Noche de las Pepitas se celebra la noche del 18 de Marzo. Y es que San José es la principal festividad de los astilleros, por eso los trabajadores del naval salían de “fiesta rachada” la noche previa por las calles ferrolanas.
Los rondallistas cuentan con su propia vestimenta, formada principalmente por la capa, la camisa, el lazo, la bufanda y las cintas con escarapelas. Además, a cada rondalla la identifican unos elementos comunes, como el color y una “bandera” propia, que suele portarla un miembro que encabeza el grupo.
La Noche de las Pepitas.
Esta fiesta, dónde la música y las mujeres son el centro de la fiesta, se celebra la tarde-noche del 18 de marzo, víspera de San José. Es un día grande en Ferrol, un día dedicado en exclusiva a homenajear a la mujer ferrolana.
La realidad es que esta popular fiesta tuvo sus horas bajas hasta hace mucho poco, pero los ferrolanos han decidido recuperarla en estos últimos años. Y de he remarcar, que viendo la expectación en la ciudad, sobre todo al llegar la noche, indica que tendrán éxito.
Y es que la Noche de las Pepitas cuenta con más de 120 años de historia, y se ha convertido en todo un emblema de la ciudad. Por esa razón, desde septiembre de 2013 está Declarada Fiesta de Interés Turístico de Galicia.
En esta edición del 2017 participaron 8 rondallas, todas de Ferrolterra: Sonidos del Alba (Ferrol), Bohemios (Ferrol), Añoranzas (Ferrol) y Rondalla do Club de Campo (Ferrol), Lucero del Alba (Neda), Rondalla Mugardesa (Mugardos), Trovadores de Ares (Ares) y Rondalla de Cariño (Cariño).
Cada Rondalla cuenta con su propio cancionero para esa noche, en la que no faltan habaneras, pasacalles y vals . La letra de cada canción que interpretarán aparece en el pañuelo, un elegante folleto en papel que entregan a la gente para que puedan acompañar a las rondallas en sus cantos.
Nuestra noche de las Pepitas.
Esta fiesta se desarrolla por la tarde-noche, pero como queríamos aprovechar un poco el día por Ferrol, nos acercamos al Museo de Historia Natural de Ferrol (me gustó tanto que en breve le dedicaré un artículo) y a recorrer el Barrio de Canido buscando sus famosas Meninas, una expresión de arte urbano que bien merece la pena descubrir (también merece un artículo). Para completar una mañana muy enriquecedora, tocó visita al Parador de Ferrol para disfrutar de un excelente menú.
Aunque la parte más popular de la fiesta comienza a eso de las 18:00 por las calles de la ciudad, en el precioso y acogedor Teatro Jofre se celebra a las 17:00 el acto inaugural de la fiesta. Ya que estábamos por allí, no quería perdernos este acto y de paso conocer este pequeño pero muy coqueto teatro.
Después de la parte más institucional y de los homenajes al músico Xosé Luis Blanco y madrinas de este año, tocaba oír por primera vez a las Rondallas, en este caso a la Rondalla Añoranzas de Ferrol.
Eran ya casi las 18:00 cuando salimos del teatro para comenzar las Rondallas por las calles de la ciudad. Desde allí mismo, frente al Teatro, empezaron a partir las rondallas escalonadamente para hacer la ruta que les llevaría por las calles Concepción Arenal, Real, Lugo, Galiano, Dolores, Plaza de Amboage y de nuevo Real, para acabar junto al Casino de Ferrol.
Según pasábamos por las calles, acompañando a las rondallas, pudimos descubrir como Ferrol y los ferrolanos disfrutan con esta celebración, muchos de los cuales cogían los pañuelos que iban repartiendo algunos miembros de cada rondalla. Desde algunas ventanas y negocios las mujeres ofrecían bombones y dulces a las rondallas que les dedicaban alguna canción.
Según pasaba la tarde el ambiente en las calles de Ferrol se fue caldeando, y a eso de las 20:00h las calles aledañas a la Plaza de Amboage estaban ya a rebosar de gente.
Otra tradición en la noche de las Pepitas es agasajar a las mujeres con bicos, los conocidos como “Bico das Pepitas”, unos dulces de naranja y chocolate en forma de corazón. En varias cafeterías y negocios de la ciudad siguen manteniendo esta tradición y “ofrecen” los bicos a las mujeres.
Cuando llegamos a la carpa instalada en la Plaza de Amboage allí no cabía un alma. Incluso fuera de la carpa, disfrutando de la música, se arremolinaban centenares de personas. Si hubiesen preparado un espacio lo doble de grande, se hubiese llenado. Eso dice mucho de cómo los ferrolanos se vuelcan en esta noche de las Pepitas.
A lo largo de la noche iban subiendo al escenario una a una todas las rondallas en un ambiente festivo que revitalizaba la noche de Ferrol. Pero la noche no acababa aquí, una vez acabado este acto en la plaza, las diferentes rondallas continuaron sus particulares rutas hasta diferentes bares y locales de Ferrol, como el célebre Casino. Empezaba la fiesta más personal de cada rondalla, rodeados de los suyos y de quién quisiera acompañarlos.
Según me contó algún miembro de alguna rondalla, la tradición es acabar la noche acompañando a la madrina hasta el portal de su casa. Una vez allí, le cantan una última canción para que la madrina se vaya “feliz” a descansar.
Porque no olvidemos que la noche de las pepitas es un homenaje a las mujeres, pero sobre todo para las “madrinas” de cada Rondalla.
*Agradecimientos a Turismo de Ferrol por hacernos partícipes de esta fiesta popular.
¡Cuanta información desconocida! ¡Está genial!
Me encanta la Noche de las Pepitas. Muchas gracias por compartirlo con todos. Además, hasta salgo en una foto